Tras una larga batalla con Google, por fin pude recuperar esta cuenta(Recomiendo inmensamente que si se conectan a una cuenta muy vieja lo primero que hagan sea actualizar los datos de recuperacion, probablemente la siguiente vez te la pida)
Publicare mi primera historia, como prometí el año pasado, después de mucho tiempo. Quizás algunos la hayan visto en writing.com (la escribí yo). La historia ya está escrita, pero la dividiré en tres partes para facilitar su lectura. Se desarrolla en el universo de Genshin Impact.
Parte 1:
"Solo quiero saber, ¿por qué siempre que hay un problema en Inazuma ustedes se involucran?" preguntó Kujou Sara.
"Creo que la verdadera pregunta es ¿por qué siempre se involucran en las actividades de la gran pandilla Arataki?", dijo Arataki Itto enojado, ya que su plan de hacer una exhibición pública para reclutar nuevos miembros había sido detenido por la comisión Tenryou.
Tanto Genta como Mamoru permanecieron enojados junto a Itto, intentando justificarse ante el temible Tengu. Normalmente Akira estaría con todos ellos luchando por la banda de arataki, pero sabía que todo había sido culpa suya.
Él debió hacer la solicitud a la comisión para tener el espacio para hacer la exposición pero por más que lo intentó nadie dentro de la comisión les hizo caso, él intentó negociar con los comerciantes locales para que le dieran un espacio pero lo único que hicieron fue reírse de él y decirle que se buscara un trabajo y dejara de molestarlos.
"¿Es que no puedo hacer nada bien?", pensó Akira.
La situación parecía la habitual, donde la comisión solía llamarles la atención y, como mucho, pedirles que se fueran, pero esta vez Kujou Sara tenía otros planes.
"Esta vez no los dejaré ir", dijo Kujou Sara mientras hacía una señal a los guardias y preparaba su arco.
"Esperen, no queremos problemas", dijo Itto mientras preparaba su mazo y se colocaba al frente para proteger a los demás miembros de la banda.
La situación se estaba agravando más de lo esperado. Normalmente, en estos casos, Kuki Shinobu resolvería la situación interviniendo entre ambos bandos, pero, por desgracia para todos, no estaba allí. Instintivamente, ninguno de los dos quería agravar la situación, pero ya había varias personas observando el caos formado y ninguno quería parecer débil.
Todos se sorprendieron al ver a Akira actuar, pero Kujou Sara fue más rápida y, comprendiendo la acción de Akira, procedió a arrestarlo con gratitud para poner fin a esto. Itto intentó intervenir, pero Genta y Mamou lo detuvieron, ya que era inútil. Akira ya había confesado y se había entregado a la comisión, así que solo le quedaba prometerle a su amigo que lo sacarían de allí rapidamente.
Akira estaba esposado y, de camino a la comisión, oyó cómo la gente lo miraba con desprecio; después de todo, para ellos era un inútil que solo causaba problemas. La sentencia no fue tan severa como Akira esperaba, ya que solo fue sentenciado a una semana entera tras las rejas debido al caos que había creado. Podía sentir que Kujou Sara había sido generosa con él, ya que había logrado sacarlos de esa situación incómoda.
La mazmorra estaba ubicada en un piso subterráneo de la propia comisión Tenryou y Akira era la única persona dentro. La celda era pequeña y no tenía forma de mirar hacia afuera. Normalmente, un guardia vigilaría la entrada para evitar molestias, pero al verlo, los guardias se rieron y dieron por sentado que un hombre pobre como él jamás podría escapar, así que simplemente cerraron la puerta y se fueron a beber, dejándolo solo.
"Parece que ni siquiera merezco el tiempo de los guardias que deberían estar vigilándome", pensó Akira mientras lamentaba lo poco que valía su vida. Sin muchas esperanzas, se hizo una pregunta que cambiaría radicalmente su vida: Solo deseo tener la oportunidad de empezar de nuevo y ser respetado en Inazuma
Las palabras de deseo me resonaron en la cabeza por un instante. Al principio me parecieron una locura, mientras intentaba convencerme de que no necesitaba respeto. Mi único objetivo era que la banda tuviera éxito; esto era lo que yo consideraba una familia, y seguro que con un poco más de esfuerzo podríamos conseguir nuevos miembros y que me vieran como su superior.
"Claro", pensé. En lugar de pensar en tonterías como esta, debería estar pensando en ideas que nos hicieran notar y que nos permitieran entrar a nuevos miembros. Seguro que Itto y Shinobu vienen a rescatarme, y podría devolverles el favor con un par de ideas que no nos metan en problemas.
Pasé el resto de la noche pensando en voz alta un nuevo plan que no nos metiera en problemas. El fallo fue no haber conseguido el permiso de alguien influyente en el gobierno. Si conseguíamos convencer a un miembro de la Tri-Comisión, podríamos llamar la atención en un evento sin meternos en líos. ¿Quizás a alguien de la Familia Kamisato, como Kamisato Ayaka?
"Esperaré a que llegue el Jefe para presentarle mi idea y elegir a nuestro objetivo más fácilmente", pensé mientras me preparaba para esperar a que me rescatara.
...
Diario mental de Akira.
Día 1: Logré identificar la comisión a la que iremos. Si conseguimos el favor de cierta persona en particular, podremos realizar los eventos sin problemas. Ya está oscuro, así que me iré a dormir y esperaré a que Shinobu y los demás me despierten en cuanto vengan a rescatarme.
Día 2: Me sorprendí al despertar y ver que seguía en la prisión. Seguramente vinieron a intentar liberarme, pero debí haberme quedado dormido. Intentaré dormir durante el día para estar listo para la noche.
Día 3: Pasé toda la noche despierto y no recibí visitas ni información de la pandilla. Seguramente no querían que escapara rápido para evitar problemas con Kujou Sara; de todos modos, creo que con 3 días entre rejas no se molestará si me liberan hoy. Después En fin, hoy no he recibido ninguna atención de los guardias.
...
Día 6: Estoy empezando a preocuparme. El castigo por el alboroto que armamos no debería ser más de 5 días. ¿Por qué demonios sigo aquí? Durante el cuarto y quinto día no recibí comida ni agua, y en cuanto las recibí hoy, los guardias se negaron a responder a mis preguntas. Algo raro debe estar pasando y mi única esperanza es que la pandilla venga a sacarme de aquí.
...
Me sentía desesperado; llevaba varios días sin comer ni beber ni una gota de agua. Estaba al borde de la muerte y empezaba a alucinar. A veces oía las voces de mis padres, las de los miembros de la banda y las de los guardias riéndose de mí. Fue una locura porque casi caigo inconsciente, vi una alusión a la persona en la que pensé el primer día, esa persona que, si ganábamos su favor, podría ayudarnos.
"¿Estoy tan loco que esto será lo último que veré en mi vida? Pensé al ver a la persona frente a mí en la celda intentando abrirla. En cuanto logró romper los barrotes, la visión comenzó a brillar con tanta intensidad que cubrió toda la habitación y me hizo perder el conocimiento.
